Mujer de negocios y activista colombiana mejor conocida por haber hecho campaña por una ley enfocándose en responsables de ataques con ácido a lo largo de Colombia.
Mientras visitaba a su madre en Santa Bárbara en el 2014, fue atacada por Jonathan Vega, quien arrojó un litro de ácido sulfúrico sobre ella. Posteriormente se tuvo que someter a 15 cirugías de reconstrucción en su cara y cuerpo.
A través de sus campañas y su libro "The Rebirth of Natalia Ponce de León," una nueva ley en su honor fue creada para definir los ataques con ácido como un crimen específico y elevar la sentencia máxima a 50 años en prisión.
Nació y creció en Bogotá, Colombia.
Otros activistas de Colombia incluyen a Ophelia Pastrana y Andrés Useche.