Tras luchar en la guerra de la Independencia Mexicana, la guerra entre México y Estados Unidos y varios otros conflictos militares importantes, fue Presidente Interino de México en 1855.
Antes de unirse a la lucha por la independencia mexicana en sus veinte años, trabajó como ranchero y ganadero.
Fue una figura fundamental en el período liberal del siglo XIX, que se conoce en la historia mexicana como "La Reforma."
Su padre fue un ranchero de origen español y su madre fue una acaudalada mexicana. Pasó su juventud entre Atoyac de Álvarez y Ciudad de México, México.
En 1854, Álvarez lideró una revolución que cumplió el objetivo planteado por Benito Juarez de acabar con la dictadura de Antonio López de Santa Ana.