Zorro es liberado de prisión después de 20 años y se vuelve a conectar con su hija. Cuando Zorro escucha que su antiguo enemigo viene, entrena a un hombre para convertirse en su sucesor, quien más tarde se enamora de la hija de Zorro.
Antonio Banderas hizo varias de sus escenas de riesgo para la película. La película estuvo nominada a un Óscar.